La nariz del perro, comúnmente conocida como trufa, es una de las zonas más importantes de su anatomía, pues proporciona valiosa información sobre su estado de ánimo y su salud. Por este motivo debemos mantenernos atentos a cualquier cambio que pueda producirse en la zona, como la decoloración o despigmentación. Te contamos las causas que provocan este fenómeno.
Causas naturales
A veces el perro posee una despigmentación natural en su nariz desde el nacimiento, una especie de coloración “manchada” frecuente en razas como el pit bull, el border collie o el pastor australiano. Tiene lugar debido exclusivamente a factores genéticos, aunque la trufa puede cambiar de color de acuerdo a las distintas condiciones climatológicas; por ejemplo, suele adquirir tonos más claros en invierno, debido a la reducción de luz solar. Todo ello no supone ningún problema para la salud del animal.
Síndrome uveodermatológico
Es un trastorno autoinmune cuyos síntomas incluyen inflamación ocular, irritaciones cutáneas en la zona perianal, escroto, vulva y almohadillas, y despigmentación de la trufa. Requiere un diagnóstico inmediato, para el cual el veterinario realizará pruebas como análisis de sangre y de orina, biopsia, hemograma o test de anticuerpos antinucleares.
Nariz Dudley
Así se conoce a una anomalía genética que produce como único síntoma la decoloración de la nariz. Se presenta de forma progresiva, haciendo que toda la trufa acabe siendo rosada. No conlleva graves riesgos para la salud del animal, aunque esta zona se vuelve más vulnerable ante posibles quemaduras solares.
Lupus eritematoso sistémico
Consiste en una enfermedad autoinmune que puede dar lugar a poliartritis, anemia hemolítica y alteraciones cutáneas, entre las que se encuentra la despigmentación de la trufa. Todo ello a menudo va acompañado de fiebre, decaimiento y dificultad para caminar. Su diagnóstico incluye pruebas de diferentes características, como analíticas, biopsias y test de anticuerpos. Requiere atención veterinaria inmediate.
Otras causas
Existen otras razones que favorecen la decoloración de la trufa, como:
1. Carencia de vitamina B.
2. Alergia. Es posible que algún elemento con el que el perro mantenga contacto frecuente, como el comedero, le provoque alergia. Es común esta reacción ante el plástico, por lo que es mucho más recomendable usar platos metálicos.
3. Envejecimiento.
4. Quemaduras solares. Algunos canes son especialmente susceptibles a los rayos del sol, y la zona de la trufa está continuamente expuesta a los mismos. Para protegerla lo mejor es aplicar un protector solar especial para canes antes de cada paseo.